Es de suma importancia regresar a nuestras raíces y enorgullecernos de quienes somos, afirmó Miranda Sánchez, estudiante de Comunicación y maestra de canto coral en la Asociación Sembrando Frutos, la cual busca fomentar las tradiciones mayas y alejar a las futuras generaciones de vicios.
En entrevista para este medio, Sánchez Miranda comentó que el grupo de coro está conformado por aproximadamente treinta niños de entre cuatro y 11 años provenientes de las comunidades de Kaua y San Francisco, al oriente del estado de Yucatán.
Al respecto, Miranda platicó que el equipo que asiste cada sábado a la comunidad se conforma por cuatro maestros, entre los que se encuentra ella, así como la profesora Rosalí Noh, encargada de la traducción maya-español, Alejandra Lopezllara, maestra de danza prehispánica y secretaria administrativa de la asociación y Don Asterio Cen Dzul, un h’men maya, término que traducido al español significa médico de tradición.
La futura comunicóloga añadió que el objetivo de la asociación es rescatar y conservar la tradición maya, a través de la música, la danza y la cultura. Con este fin, la organización se encarga de impartir clases de danza prehispánica, canto coral, tradición y cultura maya.
“Creo que es de suma importancia regresar a nuestras raíces, enorgullecernos de quienes somos y agradecerle a la madre patria todo lo que nos da. Todos los mexicanos deberíamos amar nuestra historia; muchos quisieran tenerla”, argumentó Sánchez Miranda al reiterar su compromiso con esta comunidad, a la que empezó a ir como voluntaria hace seis meses y de la cual quedó fascinada por el gran compromiso de los niños.
Destacó que los talleres son un ejemplo de cómo cosas del corazón, como la música y la danza, pueden contribuir al desarrollo de una comunidad.
Otra de las finalidades de este trabajo, añadió, es alejar a los niños de la delincuencia y acercarlos a su cultura madre a través del arte.
