Una semana atrás no había respuesta. Hace una semana, la policía federal cometió uno de los actos más equívocos que pudo haber realizado en lo que va del mes que apenas comienza y el anterior. Como normalmente sabemos, en este país los delitos pasan desapercibidos; si no, tomen en cuenta algunos de los casos de cientos de personas muertas o desaparecidas que hubieron durante este sexenio. Si este atentado no hubiera sido contra diplomáticos de la embajada de los Estados Unidos creo que nadie movería ni un dedo por tratar de solucionar la situación.
Los abusos en México siguen a la orden del día: primero se rumoraba que la policía quien atacara la camioneta de los dos integrantes de la CIA y un marino de nacionalidad mexicana tuviera nexos con la delincuencia organizada, pero ¿qué hacia la policía rondando por esos rumbos específicamente a las ocho de la mañana?, ¿Por qué estos federales no tenían uniformes a la hora del tiroteo?, ¿Por qué no se identificaron antes disparar?
Ahora ya el caso está resuelto, pues Alejandro Poiré aseguró que la agresión a los instructores de tiro estadounidenses y a un marino fue un simple malentendido, pues un día antes de que esto se suscitara un funcionario del Instituto Nacional de Antropología e Historia había sido secuestrado y en consecuencia a esta denuncia fue que la policía actuó, dio a entender el secretario de Gobernación.
Pero siguen habiendo dudas creo yo, si era un acto delictivo el que investigaba la policía y queriendo suponer que era gente calificada, no es normal que vayan por la vida disparando a quien se les cruce en el camino sin antes pedir que este se detengan.
Atentar contra ellos por el hecho de parecer un presunto culpable se me hace otra manera muy ilógica de “investigar” un secuestro, suponiendo que es lo que pretendían estar haciendo, ya que las placas de la camioneta eran diplomáticas así que no creo que no tomaran ese dato en cuenta.
Y si bien los 12 policías federales que posteriormente fueron detenidos estaban en cumplimiento de su labor, ¿qué paso con ellos al terminar el tiroteo, a dónde fueron? si en el lugar de los hecho no fueron detenidos, de igual manera los elementos de la Armada de México llegaron muy rápido al lugar de los hechos, ¿no?
Él que dice haber tenido el honor de gobernar en nuestro país por los últimos seis años pareciera que sólo está interesado en resolver los problemas que se susciten con el extranjero, ¿acaso sólo eso le importa?, porque si el problema es referente al interior del país es un caso más que se aplaza para años y años, a quién le deja la cuenta de tantos delitos sin resolver, porque no es el narcotráfico el único delito en el país.
Mientras que los agentes de “inteligencia” de la Secretaría de la Seguridad Pública que intervinieron en la agresión actuaron de manera tonta, la canciller Patricia Espinosa Cantellano elimina la posibilidad de tener problemas en la relación de los Estados Unidos con México, y el secretario de Gobernación sigue preocupándose por conocer si existió alguna mal intención por parte de la policía para castigarla de la manera que se necesite.
Y mientras, nosotros qué hacemos, ¿nos vamos a vivir a otro país para que nuestros problemas de inseguridad sean menores o resueltos más rápido?, o simplemente podemos seguir haciendo lo que venimos cosechando desde hace años, NADA.