El líder sudafricano Nelson Mandela, de 94 años, se encuentra hospitalizado en Qunu, su localidad natal. Su estado es crítico, recibe respiración asistida y cada tres horas se somete a diálisis por un fallo renal.
Al parecer el personal médico le ha pedido a la familia que tome una decisión sobre la posibilidad de desconectarlo a los paratos que lo mantienen con vida. Todavía no hay declaraciones al respecto, pero la posibilidad de que el premio Nobel de la Paz pudiera fallecer, cambia los planes del presidente estadounidense Barak Obama con respecto a su visita a Johannesburgo.
Afuera del nosocomio en el que se encuentra ingresado desde hace 19 días, se ha convertido mural de balones, ramos de flores, veladoras y tarjetas con buenos deseos para el líder de la lucha contra el Apartheid.
Miles de personas de diferentes partes se han translado al lugar para demostrar su cariño a la familia y a Nelson Mandela.
