Por: Marina Carrillo Ponce
La obesidad en nuestro estado es un tema preocupante, sobre todo la obesidad que se presenta entre la población de cinco a 11 años, ya que Yucatán ocupa el primer lugar nacional en obesidad infantil.
El problema de la obesidad infantil en nuestro estado se lo podemos atribuir a muchas cosas, como por ejemplo, la mala alimentación en la familia, a las grandes compañías de comida chatarra, a las escuelas, a las costumbres alimenticias del extranjero, a las nuevas tecnologías, etc.
En mi opinión, es una combinación de todas estas cosas. En México existe una gran cantidad de familias con bajos recursos y, desafortunadamente, la comida chatarra es mucho más accesible, económicamente hablando, que la comida saludable. Esto lleva a que muchas personas consuman alimentos que no los nutren y que, por el contrario, los hacen engordar.
Otra razón puede ser que muchas de las madres de familia trabajan y no tienen tiempo de prepararles el desayuno a sus hijos. Por consiguiente, los niños desayunan en las escuelas, en las cuales, pueden comprar productos más perjudiciales que beneficiosos.
Por último, las nuevas tecnologías son una gran parte de este problema: muchos niños actualmente cuentan con celulares, computadoras y videojuegos, en los cuales pasan la mayor parte de su día. Así, con estos aparatos a su alcance, los niños ya no sienten la necesidad de salir a jugar y hacer alguna actividad física.
El Gobierno del Estado está llevando a cabo varias estrategias para frenar los altos niveles de obesidad infantil en Yucatán. Algunas de las medidas que se tomarán son: impulsar programas integrales el problema de la obesidad, establecer campañas contra las principales enfermedades relacionadas con la obesidad, fortalecer el modelo de educación física orientado a la adopción de un estilo de vida saludable y de combate a la obesidad infantil, etc.