Menos no siempre ha sido más y vestir pocas prendas no siempre ha sido símbolo de ser lindas o coquetas, al contrario. Basta con ver el atuendo de Miley Cyrus en el concierto de iheartradio para convencernos de que las mallas transparentosas son de muy mal gusto y dejan muy poco a la imaginación.
Quien enseña de más, muchas veces puede llevarse un sobrenombre poco adulador y sí muy ofensivo. Un suéter bonito y una falda corta pueden hacerte ver mucho más elegante que tratar de llamar la atención enseñando toda la piel.
Para lograr un buen outfit no es necesario pasar el día o cada fin de semana en la tienda comprando ropa. Los básicos han sido nuestros aliados por mucho tiempo y lo seguirán siendo, desde las faldas a la cintura hasta los suéteres anchos y grandes súper cómodos.
Para venir a la universidad no es necesario creer que estás en un desfile de moda y gastarás tus prendas nuevas para verte presentable. Pero tampoco abuses y pienses que nadie te observa y pasarás desapercibida en los pants que usas para dormir. Eso sí, antes de salir de casa asegúrate de que no haya ningún escote muy provocador o un pantalón que al sentarnos revele todo lo que traemos debajo.
Recuerda que la confianza está en ti misma y que la forma en que camines (si arrastras o no los pies al caminar), la manera en la que te sientes y hables da mucho que decir de ti.