El Secretario General de la ONU condenó el atentado, el cual calificó como terrorista, y ofreció ayuda al país africano.
Un ataque a la Universidad de Garissa, en el noreste de Kenia, hecho por el grupo islamista Al Shabab dejó como saldo 147 personas muertas y al menos 65 personas hospitalizadas.
En el ataque, sucedido este jueves, murieron cuatro terroristas, quienes irrumpieron en el centro de estudios disparando indiscriminadamente y tomando rehenes, de los cuales 500 de ellos fueron liberados por las fuerzas de seguridad del país africano, quienes realizaron un operativo para retomar el control del campus.
El Gobierno de Kenia estableció un toque de queda en cuatro regiones del país: Garissa, Wajir, Mandera y Tana River de 18:30 a 6:30 horas.
Un estudiante que fue testigo del acontecimiento, pero que logró escapar dijo que el grupo islamista asesinó inmediatamente a los cristianos, luego que los separaran entre musulmanes y no musulmanes.
Se cree que el cerebro del ataque fue Mohamed Kuno, quien antes había sido rector de una escuela islámica en Garissa hasta que renunció en 2007. El gobierno keniano estableció una recompensa de más de 200 mil dólares por su captura.
Ban Ki-moon, secretario general de las Naciones Unidas, condenó a este suceso como “ataque terrorista” y dijo que la ONU está lista para ayudar al gobierno de Kenia en lo que respecta la prevención del terrorismo y el extremismo violento.
Un analista de asuntos africanos de la BBC, Mary Harper, indicó que Al Shaab atacó la universidad porque se encuentran en guerra con Kenia.
Por último, trascendió que incluso nueve horas después del ataque, se reportó un gran tiroteo y continuaron ocurriendo explosiones.
Fuente de información: BBC Mundo y CNNEspañol
Fuente de la imagen: BBC Mundo