El centro histórico de Mérida lució como campo de juego de pelota maya ayer.
Jugadores vestidos como antiguos guerreros mayas recrearon el ancestral juego de pelota, en el que, durante una hora, acompañados de música prehispánica, contendieron por ganar un trofeo maya labrado en madera.
Así, los Cocomes vencieron a los Itzaes con una anotación en el aro, que llamó la atención por estar encendida la pelota con fuego. El evento fue organizado por el Ayuntamiento de Mérida y se celebra cada viernes a las ocho de la noche frente a la Catedral.