En estos tiempos de globalización, el arte se enfrenta a un reto enorme, el cual le traerá cosas buenas y cosas malas. Así, vale la pena preguntar: ¿Que le pasará al séptimo arte?
El cine es tan nuevo, tan inocente, que comienza a abrirse caminos dentro de toda una gama artística ya establecida. El séptimo arte inicia su conocimiento y entendimiento, sino recuérdese que apenas tiene 120 años de existencia, a comparación de la pintura, que aproximadamente lleva ya más de 40 mil años a partir de las primeras pinturas rupestres.
Pero esta nueva manera de crear arte, vive épocas difíciles, tiempos de ideologías poderosas para el ser humano.
En otro orden, Yucatán, tierra de cultura y tradiciones, hogar de leyendas e historias fascinantes, posee una gran área de oportunidad en materia de narrativa cinematográfica a la altura de los argumentos de Hollywood.
Así, aunque sin experiencia en el cine, nuestro estado comienza a abrir los ojos por la facilidad que la tecnología nos presta para poder producir cine, comenzando a darse cuenta quienes viven del cine del valor de los paisajes que Yucatán contiene.
La realidad del cine en Yucatán es que está en crecimiento, y así como Hollywood se fundó con una sola casa productora de madera y cristales, Yucatán se dará a conocer por sus paisajes y oportunidades que puede ofrecerle a cualquier producción cinematográfica.