La complejidad de un personaje histórico como Porfirio Díaz no puede simplificarse únicamente con la develación de una estatua, ya que «fue un personaje de luces y sombras», expresó Alejandro Fitzmaurice, profesor de la Escuela de Comunicación de la Anáhuac Mayab en entrevista.
Como transcendió en días pasados, la efigie del exdictador se develó en la ciudad de Orizaba, Veracruz, en una ceremonia que fue presidida por el alcalde de la urbe, Juan Manuel Diez Francos.
No obstante, la ceremonia, a la que acudieron los bisnietos del general Díaz, así como el ex presidente de México, Vicente Fox, se vio interrumpida con gritos como ¡asesino, asesino, asesino!
Al respecto, el profesor de la asignatura ‘Panorama político, social y cultural del México contemporáneo’ cuestionó, por una parte, que la estatua se encuentre en el mismo estado donde ocurrió la brutal represión de obreros de Río Blanco.
«El hecho de que esté en el mismo estado que Río Blanco, donde ocurre una represión brutal, antecedente cercano a la Revolución Mexicana, es ciertamente desafortunado. Son los hechos en los cuales se debería de tener más sensibilidad”, afirmó.
Por otra parte, Fitzmaurice Cahluni reconoció que Díaz Mori tiene un pasado heroico que no suele reconocerse, hecho que fue reconocido por el propio Francisco Madero, iniciador de la Revolución Mexicana.
«[…] Antes de su dictadura, […] fue un gran héroe […] El gran problema fue que los avances económicos, industriales y culturales que él provocó en el país no permearon al resto de la población. Ciertamente (encabezó) un gobierno en el que México avanzó, pero al precio de una represión asquerosa y espantosa», opinó.
Por lo anterior, el profesor Fitzmaurice describió a Díaz como «una persona de luces y sombras» y propuso, en lugar de la develación de una estatua, una exposición permanente, a través de la cual se pueda analizar a profundidad quién fue Porfirio Díaz, ya que -consideró- «una estatua no está contando la historia completa de un personaje como Díaz».
Durante la charla, el catedrático recordó una situación parecida al homenaje de Porfirio Díaz en Orizaba: la instalación en Mérida de la estatua de Francisco de Montejo en el Paseo del mismo nombre, lo que provocó quejas por parte de muchos ciudadanos.
En ese sentido, recordó a su vez una reflexión del historiador José Antonio Crespo, quien explica en su libro ‘Contra la historia oficial’, que el mexicano simpatiza más con los aztecas y los mayas, y no con los españoles, es decir, el mexicano se identifica más con los derrotados y no los vencedores.
«Vamos a dejar de aplicar una política simplista de poner una estatua a lo loco, eso ya no es coherente en un México que puede ver con ojos más críticos la historia de su pasado», finalizó.
Fuente de información: Sopitas.com, Noticieros Televisa.
Fuente de la imagen: http://polemon.mx/el-exito-de-krauze-ya-hay-estatua-de-porfirio-diaz/