En días pasados, Donald Trump fue elegido oficialmente como el candidato del Partido Republicano para la carrera presidencial de Estados Unidos. Su campaña ha sido motivo de controversia con el eslogan de “Make America Great Again” y sus declaraciones sobre construir una muralla entre su país y México, así como evitar la entrada de inmigrantes musulmanes.
De manera comparable, el 23 de junio, Inglaterra hizo oficial su referéndum para salir de Unión Europea, utilizando como uno de sus argumentos que los inmigrantes atentaban contra se economía y seguridad social. Los seguidores de este movimiento llevaron gorras y playeras con el mismo eslogan utilizado por Trump.
De vuelta en Estados Unidos, la policía ha desatado una discriminatoria brutalidad a la comunidad afroamericana. La mayoría de los policías culpables de asesinatos a estos ciudadanos no han tenido consecuencias legales.
Estos actos parecen haber dado permiso a los ciudadanos a expresar ideas intolerantes y xenofóbicas, así como a cometer actos violentos guiados por el racismo. Han surgido en las redes preocupantes videos de ingleses hostigando a inmigrantes y un ataque a la tienda de un hombre musulmán.
En nuestro país vecino, los niveles de xenofobia han subido de manera estrepitosa, lo que permite suponer que estos movimientos políticos han dado permiso a sus ciudadanos a expresar ideas intolerantes.