El pasado miércoles se llevó a cabo el tercer y último debate presidencial, entre Hillary Clinton y Donald Trump en Las Vegas, Nevada.
El encuentro estuvo mediado por el periodista Chris Wallace y en éste se discutió sobre tratados internacionales, WikiLeaks, acoso sexual, migración, política exterior, entre otros.
Sin duda alguna, los tres debates han sido algo que todo el mundo ha presenciado. Hillary ha presentado buenos argumentos en defensa propia y en contra de su rival. El tercer debate no fue la excepción.
Larry Rubin, representante de la American Society, afirmó que en el último debate Clinton decidió atacar en forma y carácter a su contrincante y opinó que, aunque no era una líder efectiva, se mostró fuerte evitando agredir a Donald.
Por su parte, Claudia Merino, asesora en imagen, opinó que la candidata demócrata jugó un buen papel y aseguró que uno de los factores que jugó gran peso para este papel fue el tono de voz de Clinton, así como la sonrisa que ésta mantuvo en todo momento del debate.
Los debates son solo eso: debates y no definen el resultado final de las elecciones, que se llevarán a cabo el 8 de noviembre.
Todo es cuestión de esperar y tener la esperanza que el pueblo americano tomará una decisión que beneficie no solo a esta nación sino al mundo entero.
Fuentes
http://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-37711559
