El día de ayer, la Universidad Anáhuac Mayab fue sede de la conferencia «Despertar Ciudadano: Una Visión Femenina», llevada a cabo por la Doctora en Ciencias Políticas y reconocida periodista mexicana, Denise Dresser.
Como preámbulo del día internacional de la mujer, Dresser Guerra habló sobre la desigualdad que se vive actualmente en el país. Enfatizó que existen distintos panoramas que han beneficiado a los hombres sobre las mujeres y que recientemente fue partícipe de un presidium con más de veinte hombres y ninguna mujer.
Mencionó que, a lo largo de su carrera, ha estado rodeada por mujeres que «han impulsado los límites de lo posible» y sin embargo no fueron invitadas al ya mencionado panel
Siempre hay una multitud de pantalones y pocas faldas bien puestas, dijo la Doctora.
Del mismo modo, la conferencista, quien también imparte asignaturas de política contemporánea en el ITAM, mencionó algunas cifras acerca del desempeño de las mujeres en distintas áreas laborales en el país, incluyendo a las que se dedican a las labores domésticas no remuneradas, con el fin de exponer que su trabajo constituye el 18% del producto interno bruto de la nación.
El famoso techo de cristal sigue ahí, impidiendo el ascenso, obstaculizando el ingreso, manteniendo a las mujeres en el lugar donde la sociedad mexicana piensa que deberían estar, declaró Dresser.
Afirmó que recibe múltiples comentarios a través de Twitter, cuestionando el por qué debería haber una equidad de participantes de ambos géneros en el presidium, a lo que ella respondió, citando al primer ministro de Canadá, Justin Trudeau: «porque es 2017».
La galardonada periodista también habló sobre la problemática que viven miles de jóvenes mujeres al ser limitadas en cuestión educativa, lo que obstaculiza una justa equidad salarial al momento de desempeñar la misma posición laboral.
La promesa de la igualdad no se ha traducido en la realidad de la igualdad […] un mundo verdaderamente equitativo sería ese en el cual las mujeres estuvieran a cargo de la mitad de los países y los hombres estuvieran a cargo de la mitad de los hogares, afirmó.
Mencionó que, con motivo del día de la mujer, habría un paro internacional al cual exhortó a participar a la audiencia femenina.
Subrayó que este fenómeno discriminatorio no es únicamente un problema del país y bastaba con recordar la candidatura de la ex Secretaria de Estado, Hillary Clinton, de quien afirmó que, si algo demostró su campaña, fue cuán difícil es ser candidata a la presidencia de un país y ser mujer.
Mencionó que considera que las mujeres de ahora son menos temerosas y tienen más oportunidades de triunfar que antes, por lo que invitó a la audiencia a mirar al país en donde viven millones de mujeres que no tienen las mismas condiciones de vida y que tienen que sufrir «una democracia incompleta».
Sencillamente creo que la mujeres somos superiores a los hombres, afirmó
Por último, repitió su invitación a las mujeres del auditorio a no ir a trabajar el día ocho de marzo, con el fin de que «el mundo se de cuenta de qué pasaría si dejáramos de estar presentes».
Sean mujeres que derriban las paredes de su celda, que estremecen los cimientos de lo establecido, que alcen la voz ante un país de espectadores y que logran la realización de la mujer. Mujer y cerebro, mujer y corazón, mujer y madre, mujer y pareja, mujer y profesionista, mujer y humana: Mujer y ciudadana.