En las noticias de los últimos años nunca han dejado de mencionar sobre los inmigrantes. Este tema se a vuelto cada vez más fuerte, genera una gran controversia sobre los derechos humanos, las leyes, los países corruptos. ¿Qué es lo correcto? ¿Ayudar a gente que escapa de sus países por el nivel de vida que tenían o regresarlos a sus países por las leyes de uno?
Los inmigrantes son personas… ellos llegan a otro país para residir en él, sus motivos son tener una vida mejor; quieren mejores oportunidades de trabajo, mejores puestos; buscan algo que sus países les quitaron, liberarse de una agonía que vivían, donde solo existían problemas de salud, económicos o políticos.
¿Qué significa inmigrante? La definición más general los posiciona como:
«Persona que llega a un país diferente de aquel del que procede con el objetivo de establecerse en él, hacer vida en él, trabajar, estudiar, etc.”
En ningún momento se definió la palabra como criminal o marginado y es una pena que se haya convertido en una palabra con un terrible significado.
No es de sorpresa que Estados Unidos sea uno de los países donde llegan más inmigrantes. Todos los días hay personas que caminan millas, se suben al techo de trenes, hacen todo para llegar a la tierra prometida.
Aquella ilusión de poder triunfar es destruida por los ciudadanos. Es lamentable que un país donde una gran porción de residentes son inmigrantes, que fue liberada y fundada con la ayuda de inmigrantes, donde un padre fundador fuera una persona que llega al país por algo mejor; sea el primero en darles la espalda, en tratarlos mal, en verlos con odio. Discriminan por el hecho de que vienen con la necesidad, sólo por que les pueden quitar lo que es suyo. El mejor ejemplo de este tipo de estadounidenses es su actual presidente, Donald Trump.
Aunque Donald Trump no es el primer presidente anti-inmigrantes, es el primero el que demuestra su descontento sin disimulo, hasta dá a entender con orgullo de que hará lo que fuera con tal de cometer sus planes. Ha solo dos años de estar en el poder, ya eliminó el TPS, Programa de Protección Temporal, terminó con el DACA, que ayudaba a personas que llegaban ilegalmente como menores de edad al país, y aún insiste en construir un muro en la frontera de México. Además, quiere prohibirle la entrada a cualquiera que para él no sea conveniente.
Un presidente representa a su gente, la imagen y las acciones de Trump sólo demuestra puntos negativos, desgraciadamente la población de Estados Unidos está de acuerdo, al igual que otras personas.
Ser inmigrante no es un delito, aunque ya hay reglas impuestas por el hombre, la tierra es para todos, no debería haber restricciones, las personas quieren estar bien, ellos y sus familia y eso no se le debe prohibir a nadie o castigar.
Es cierto que hay personas que al llegar a otro país son malagradecidos y actúan de una forma incorrecta o irrespetuosa, sin embargo, esa es una minoría, no se les debería excluir o etiquetar de una forma despectiva por las acciones de unos cuantos. Vienen de lugares donde no pudieron tener una buena calidad de vida, donde existen guerras o donde la comida es escasa, ya no tienen mucho que perder, la esperanza de tener algo mejor es lo que los mueve. Los Inmigrantes están dispuestos a sacrificarse para lograr sus objetivos, son ambiciosos, ellos desean vivir, no sobrevivir.
