El calentamiento global aumenta, los glaciares se derriten, el nivel del mar sube, la flora de varios países se resecan, la fauna trata de acoplarse a los cambios de su habitad y los sectores en deforestación incrementa. Todas estas consecuencias son por las acciones que han tenido los humanos desde hace décadas. Desgraciadamente, apenas hace unos años se viene tomando conciencia.
Una de las causas de que más impacta a la naturaleza es la quema de combustibles fósiles y los desechos de las industrias. El uso de los combustibles afecta directamente al deterioro de la capa de ozono.
Con el incremento del interés por el medioambiente, varias empresas han empezado a preocuparse por el planeta. Ante lo anterior, el tratar de reducir sus desperdicios se ha convertido en una prioridad. Sobre todo entre las empresas europeas, para éstas el gestionar sus residuos suponía un gasto y lograron encontrar una forma de convertirla en un ingreso y ahorro.
El especialista en gestión de residuos de Expense Reduction Analysts, Ma José Balaguer, afirmó que:
“Las principales fuentes de ahorro se obtienen tras la minimización y segregación en origen, un cambio de tratamiento de los desechos, una adecuación de proveedores, una optimización en la logística y la negociación de precios”.
De acuerdo con los estudios de esta misma empresa, varias entidades europeas, como las que están ubicadas en España, Alemania y Francia, más del 94% realizan una buena gestión en el tratamiento de los residuos y apuestan por la sostenibilidad medioambiental. Así se consigue ahorrar costos y reducir los gastos de gestión. Y de este porcentaje un 6% logra revertir el costo para convertirlo en un ingreso a través de la valorización.
La base de este éxito es la minimización en el origen, no despilfarrar la materia prima y reducir los residuos desde la fabricación del producto. Después de esto, la reutilización es el proceso más sostenible junto con la valorización.
Todas estas acciones tomadas por las empresas industriales y las que realiza la sociedad al también cuidar el ambiente a generada una pequeña disminución en el hueco de la capa de ozono, sin embargo, no es suficiente, se necesita que el porcentaje de personas tomando acción aumente para notar un gran cambio y detener el daño al planeta