Lamentable el suceso que ocurrió en Copa Sudamericana el miércoles en el partido de Independiente contra U de Chile. El encuentro se disputó en el estadio Rojo y fue cancelado definitivamente tras encuentros violentos entre las barras bravas. El encuentro fue suspendido en el segundo tiempo con el marcador en empate 1-1. Lo que debía ser una noche pacífica de fútbol se convirtió en tragedia. Fue una noche violenta que dejo un numeroso saldo de heridos de gravedad y detenidos. Esto expuso las serias fallas de organización en el operativo de seguridad.
La violencia y disturbios iniciaron durante el transcurso del primer tiempo, pero se agravaron todavía mas durante el segundo. Los Hinchas de la Universidad de Chile ubicados en la grada superior norte iniciaron a arrojar una gran cantidad de objetos. Esto resultó en una gran cantidad de heridos en la hinchada roja que de encontraban por debajo.
Ante la falta de acción del operativo policial, la hinchada de Independiente reaccionó de manera agresiva ingresando al sector visitante. Las imágenes fueron grotescas. Se vieron golpizas con palos, personas desnudadas, incluso un aficionado que cayo de lo alto de la tribuna hacia abajo al no tener escapatoria.
El saldo final de heridos varía según las fuentes, afortunadamente, no se reporta ningún fallecido. Los primeros reportes indican que hay 185 heridos, 10 de gravedad. De igual manera, hubieron mas de 100 detenidos, de los cuales todos ya fueron liberados de custodia. Desde el gobierno Chileno aseguran que la Conmebol fue la que impidió el acceso a los policías, algo que sin duda hubiera sido un factor necesario para controlar la situación.
