El Departamento de Justicia de Estados Unidos acusó a Ryan James Wedding, ex atleta olímpico de Canadá, de dirigir una red criminal transnacional ligada al Cártel de Sinaloa. Según la fiscal Pam Bondi, Wedding es uno de los diez fugitivos más buscados por el FBI y su organización sería responsable de importar unas 60 toneladas métricas de cocaína al año hacia Estados Unidos, especialmente mediante camiones que cruzan desde México.
Las autoridades estadounidenses afirman que Wedding colabora “estrechamente” con el Cártel de Sinaloa para distribuir cocaína tanto en comunidades de EU como de Canadá.
Paralelamente, México también lo investiga. El gobierno mexicano ha señalado al ex atleta como presunto traficante de cocaína, lo que refuerza la magnitud de la acusación internacional.