Neymar tendrá que someterse a una artroscopia en la rodilla izquierda, intervención que lo mantendría fuera de las canchas durante aproximadamente tres semanas, en un momento crítico para el Santos FC, que lucha por evitar el descenso en el Campeonato Brasileño.
La información, confirmada por ESPN, señala que “el problema no es grave”, pero sí requiere una cirugía menor para garantizar una recuperación completa. A pesar de ello, el club y el jugador han optado por retrasar la operación hasta el término del Brasileirao, con la esperanza de que un tratamiento alternativo permita al futbolista regresar antes del cierre del torneo.
Neymar se lesionó durante el empate 1-1 frente a Mirassol, en un partido disputado el pasado miércoles. La dolencia lo marginó también del reciente encuentro ante Internacional, que terminó con el mismo resultado. La molestia tiene origen en una inflamación del menisco de la misma rodilla operada previamente este año.
De acuerdo con ESPN, “todo se ha tratado con gran secretismo dentro del club”, al punto de que varios empleados y miembros del cuerpo técnico no estaban informados de la situación clínica del jugador. El tratamiento actual busca aliviar el dolor para evaluar si Neymar puede volver a estar disponible antes de una posible intervención quirúrgica.
En la actualidad, Santos ocupa la posición 17 de la tabla, en zona de descenso directo, con apenas 38 puntos. Solo lo separan uno y dos puntos, respectivamente, de Vitória e Internacional, sus principales rivales en la lucha por la permanencia. En las últimas tres fechas, Santos enfrentará a Sport Recife, Juventude y Cruzeiro, encuentros clave para definir su futuro en la Serie A.
La incertidumbre en torno al estado físico de Neymar se agrava debido a su historial reciente de lesiones. Desde su retorno a Santos a principios de 2025, ha sufrido ya cuatro problemas físicos: un edema en el muslo izquierdo en marzo, una lesión en el mismo muslo en abril, una lesión grado 2 en el muslo derecho en septiembre y, ahora, la lesión en el menisco de la rodilla izquierda.
Ante este panorama, dentro del club comienza a crecer el temor de que Neymar ya no vuelva a vestir la camiseta del “Peixe”. Su contrato actual vence en diciembre y, si bien todas las partes han manifestado su deseo de extender el vínculo, dicha decisión dependerá en gran parte de que Santos logre mantenerse en la primera división. La permanencia es clave tanto desde lo deportivo como lo económico, especialmente considerando que Neymar aspira a integrar la selección brasileña en el Mundial de 2026.
Fuentes citadas por ESPN admitieron que, aunque se hará todo lo posible para que el delantero esté presente en el tramo final del campeonato, “no son optimistas de que lo logre”. Esto alimenta las versiones que sugieren que Neymar podría haber disputado ya sus últimos minutos con Santos, al menos en este 2025.
El futuro inmediato del ídolo brasileño está en suspenso, mientras el club enfrenta una de las etapas más delicadas de su historia reciente.