Los Archivos Nacionales de Estados Unidos (NARA) han publicado documentos inéditos sobre el asesinato de John F. Kennedy (1961-1963). La desclasificación se realizó por orden del presidente Donald Trump.
A través de su página web, los Archivos Nacionales anunciaron la desclasificación de estos documentos. Trump había adelantado la publicación de 80,000 archivos, pero hasta el momento solo se han hecho públicos 1,123.
Durante una visita al Centro John F. Kennedy para las Artes Escénicas en Washington, Trump afirmó que “tenemos una enorme cantidad de documentos. Tienen mucho que leer”.
Más documentos serán publicados
Según la directora de Inteligencia Nacional, Tulsi Gabbard, el resto de los archivos ya han sido desclasificados, pero aún no se han subido en línea. Se espera que esto ocurra en los próximos días.
Expertos están analizando la información en busca de datos inéditos sobre el asesinato de Kennedy. Trump aseguró que todos los documentos serán publicados en su versión íntegra, sin tachaduras, a diferencia de otros archivos históricos considerados sensibles.
Desclasificación por orden ejecutiva de Trump
La publicación de estos archivos responde a una orden ejecutiva firmada por Trump tras regresar a la Casa Blanca. La orden instruyó al FBI a localizar miles de documentos adicionales sobre el asesinato de Kennedy y hacerlos públicos.
Además, la orden contempla la divulgación de archivos federales sobre los asesinatos de Robert F. Kennedy y Martin Luther King Jr. en 1968.
La versión oficial: un solo responsable
El asesinato de Kennedy ha sido atribuido oficialmente a Lee Harvey Oswald, un ex infante de Marina. Según la versión oficial, Oswald disparó contra el presidente desde una ventana de un almacén de libros en la plaza Dealey de Dallas, Texas.
Dos días después, Jack Ruby, dueño de un club nocturno, asesinó a Oswald en la sede de la policía de Dallas.
En 1964, la Comisión Warren, creada por el presidente Lyndon B. Johnson, concluyó que Oswald había actuado solo y que no había evidencia de una conspiración.

A pesar de la versión oficial, el asesinato de Kennedy ha generado múltiples teorías conspirativas.
El actual secretario de Salud de EE.UU., Robert F. Kennedy Jr., sobrino de John F. Kennedy, ha cuestionado las conclusiones de la Comisión Warren. Incluso ha señalado la posible implicación de la CIA en el magnicidio.
Aunque los nuevos documentos desclasificados podrían aportar más información, expertos advierten que no se esperan revelaciones impactantes.