En el entramado social de México, las madres solteras representan una pieza fundamental . Enfrentan desafíos únicos al criar a sus hijas en solitario, siendo esta una realidad para millones de mujeres. Por ello, con resiliencia y amor, las madres construyen relaciones sólidas con sus hijas, desafiando estereotipos y superando obstáculos.

Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Al cuarto trimestre de 2022, en México residían 56 millones de mujeres de 12 años y más; de ellas, 67% (38 millones) eran madres. De este total, el 11% estaban solteras, lo que equivale aproximadamente a 4.18 millones de mujeres que enfrentan la maternidad sin una pareja estable .
La relación entre una madre soltera y su hija se ve moldeada por múltiples factores. Desde las responsabilidades económicas hasta las dinámicas emocionales. La ausencia paterna impacta en las hijas, pero también promueve lazos basados en la confianza y el apoyo mutuo.
De acuerdo con el INEGI, siete de cada diez madres solteras son económicamente activas, y el 97% de ellas están ocupadas . Por ello, muchas madres tienen que equilibrar jornadas laborales extensas con el tiempo de calidad dedicado a sus hijas. Ante esto, nacen vínculos basados en valores como la independencia, la responsabilidad y la empatía.
Un aspecto alentador es el nivel educativo de muchas madres solteras. Se muestra que el mayor porcentaje de ellas se ubica entre los 30 y 34 años de edad; además, cuentan con algún grado de educación media superior y superior (40%) . Con ello, las madres se convierten convierten en modelos a seguir para sus hijas, inculcándoles la importancia de la educación y la perseverancia.
La maternidad en solitario no significa estar sola. En sí, muchas madres solteras encuentran en sus familias extendidas, amistades y comunidades locales, redes de apoyo esenciales para la crianza de sus hijas. Como tal, estas redes, ofrecen soporte emocional y apoyo en cuidados infantiles.
Como estudiante de Comunicación, identifico las narrativas en este caso. En torno a las relaciones entre madres solteras y sus hijas existen estigmas. Se debe enfocar en la fuerza e historia que conllevan estos vínculos, no debe ser fácil ser madre en esas condiciones.