En enero de 2010 se anunció el inicio de un juicio oral en contra del último dictador argentino Reynaldo Bignone, acusado de cometer crímenes de lesa humanidad tales como secuestro, tortura y desaparición de empleados del Hospital Posadas, en Buenos Aires Argentina. Con esta sumaría su tercera condena.
El pasado 23 de agosto de este año Bignone regresa a juicio, junto con los exmilitares Santiago Riveros y Eugenio Guarañabens Perelló, acusados de cometer delitos de la misma índole en perjuicio de 20 personas, entre ellas 7 embarazadas que fueron secuestradas, torturadas y asesinadas durante el régimen del exdictador (1976-1983).
En ese juicio se probó que hubo maternidades clandestinas en los campos donde las desaparecidas daban a luz a sus bebés en condiciones infrahumanas para posteriormente arrebatarles a sus hijos y aseninarlas.
“Laura Catalina es hija de Miryam Ovando y Raúl de Sanctis, ambos desaparecidos, y nació durante el cautiverio de su madre, secuestrada el 1 de abril del 77, esta aún embarazada de siete meses” aseguró la entidad humanitaria “Abuelas de Plaza de Mayos” quienes se encargaron de dar asilo y velar por a los casi 500 bebés robados durante el régimen del exdictador. Así como Laura, se estima el caso de mucho bebes más que estarán dando pruebas en contra del acusado.
Del juicio, solo se leyó la acusación y la audiencia se pospuso para el 30 de agosto de este año.