Roch Lugo, abogado y caricaturista

Sería fantástico que todas aquellas personas que nacieron para realizar algún tipo de arte pudieran dedicarse y subsistir única y exclusivamente con ello, pero desafortunadamente no siempre se puede hacer así. Muchos artistas tiene además que estudiar «alguna carrera seria» para tener algo seguro. Rodrigo Lugo, mejor conocido como «Roch», estudió primero abogacía para poder tener algo seguro, sin embargo nunca abandonó su pasión por el dibujo, la cual, realiza a la par de su faceta como abogado.

Desde niño, como muchos otros artistas, tuvo esa inclinación por el dibujo pero como era el único de su familia no era muy bien visto. Afortunadamente ahora ellos se dan cuenta de que él nació con un talento del cual sabe sacarle provecho. «Roch» Lugo nació el 22 de febrero de 1980 aquí en la bella ciudad de Mérida, y ha estado presente en algunas convenciones como el Tsunanmi SP4, los días 18 y 19 de julio en el Centro de Convenciones siglo 21. Ahí dibujó, en vivo, con la técnica pastel, a «Dalshim» de Street Fighter. Muy amablemente cedió a regalarme unos minutos de su tiempo para hablarme acerca de él y su carrera artística.

EA: ¿Hace cuánto que dibujas?

Rodrigo Lugo: Mi pasión por el dibujo viene desde muy pequeño, pero hace dos años y medio empecé a adentrarme en el estilo de las

caricaturas. Yo participaba en un programa de división local de comedia. Yo ahí tenía que caricaturizar a los invitados que fueran a ese programa en un lapso de 30 minutos, que era lo que tardaba. Realmente fue ahí cuando empecé a especializarme en eso, pero me encanta el dibujo en general.

EA: ¿Estudiaste algo a fin a eso?

RL: Referente al dibujo no he estudiado nada, hace poco tomé un curso que tardó seis meses con el maestro Miguel Cano Mezquita, ahí aprendí a utilizar lo que es el color pastel. Antes de eso todos mis dibujos los hacía en blanco y negro. Le tenía pavor al color porque no me sentía confiado, sentía que me iba a salir mal, sin combinación. Gracias a ese curso me enseñaron a usar el pastel en el dibujo artístico y eso lo traspasé a la técnica de la caricatura, lo demás es gusto y amor por el dibujo. Lo que estudié como carrera fue Derecho.

EA: ¿Cómo es que decidiste estudiar derecho si te gusta mucho dibujar?

RL: Primero porque estoy loco, en segunda porque me enviaron a este mundo con el gusanito del dibujo. Muchos me preguntan porque no estudié diseño gráfico. Desafortunadamente, en nuestro país, el dibujo y el arte en general no se le aprecian como debería. Nuestra sociedad no está preparada económicamente porque, por ejemplo, una persona que quiere vivir sólo del arte necesita un mercado para subsistir, todo eso cuesta, no hay mucha gente que vaya comprarte un cuadro o un dibujo porque la mayoría de la sociedad mexicana está pensando en que comerá mañana, no en qué cuadro le gustaría colgar en su sala.

Estudié una carrera con la que pudiera subsistir, sin embargo nunca abandoné mi pasión. Cada vez que puedo comparto con mis compañeras Beatriz Castro y «LoLÒ», ellas casi solo viven de eso, están más dedicadas a ello. Yo tengo mi faceta como abogado. Ellas me dan tips, es muy  padre esa unión que hicimos porque nos damos consejos, cada uno tiene una técnica y estilo diferente. Si ven nuestros trabajos, pueden identificar de quién es cada quien, es importante la retroalimentación.

Lo que me gusta de estar con ellas es que no existe envidia, al contrario, nos admiramos mutuamente, gracias a eso de cada persona aprendo un poco más.

EA: ¿Tus padres te apoyaron?

RL: Me decían que sólo era un hobby, como soy el único que dibuja en mi casa soy “el bicho raro”, pero les gusta porque es un talento que saben que gracias a Dios uno tiene y me apoyan mucho, aunque de chico no tanto, creían que era solo un pasatiempo pero se dieron cuenta que pude sobresalir un poco y seguir adelante. Mis padres son los primeros críticos y los más duros y se los agradezco infinitamente.

EA: ¿En qué lugares has expuesto?

RL: Como todavía soy novel, mi primera exposición fue la que estuvo hace un mes aproximadamente en el Centro Cultural Olimpo. Expuse junto con mis dos compañeras, caricaturizamos obras de arte con artistas o personajes conocidos, haciéndolo de una forma divertida. Fue una experiencia padrísima, yo la verdad nunca había expuesto y me encantó. Esperemos que esa exposición se lleve a otros municipios u otros lugares. Muchos amigos nos patrocinaron y nos ayudaron con la publicidad. Estoy contento con el resultado, vamos por más, igual mandamos un mensaje a todos los que tengan interés poder llevar este tipo de exposición, quizás no la misma, pero llevar alguna a algún lado, a que se comuniquen con nosotros.

EA: ¿Qué les recomiendas a los artistas que tienen intención de exponer por primera vez?

RL: En cuanto a exposición en primer lugar hay que tener mucha paciencia  y perseverancia y seguir y seguir no dejar que nadie te «tire» anímicamente “que no expone cualquiera que solo artistas conocidos o extranjeros”. Eso nos pasó a nosotros: nuestras propias autoridades nos pusieron un alto, nos dijeron que “no tenemos nivel, que no somos nadie, que cómo nos atrevíamos a exponer en el Olimpo”. Queríamos exponer ahí porque somos yucatecos y tenemos derecho de expresarnos, para eso está, para eso lo construyeron y en ese camino siempre habrán ese tipo de personas que te intentarán bajar. Van a ver personas que no les agraden o que andan «troleando» todo lo que hagas, es cuestión de ignorarlos, sé como un caballo de carreras, enfócate en tu meta  y practícalo. Lo más importante de todo esto es amar lo que haces porque, si tú no lo disfrutas, no va a servir de nada, cuando te das cuenta de tus resultados ni siquiera lo verás como un trabajo.

EA: ¿Te has frustrado realizando algún trabajo?

RL: Es parte del crecimiento, son experiencias que te ayudan. Muchas veces te clavas tanto dibujando y cuando ves el resultado, no le diste buena perspectiva, te quedó chueco, se te salió una línea, etc., es muy relativo, siempre te pasará. Hasta a los más grandes les pasa. Leonardo Da Vinci no estaba complacido con lo que hacía. Nosotros lo admiramos por las grandes obras y los grandes dibujos que ha hecho, lo vemos como un maestro, pero en su época él veía sus resultados y no le gustaba. Sólo es cuestión de asimilarlo y echarle ganas, hay gente que te dice “no sirves, dedícate a otra cosa, está feo”, no les hagas caso, tú sigue.

EA: ¿Qué artistas te sirven como fuente de inspiración?

RL: Sería muy difícil escoger a uno, he visto y leído muchos trabajos de artistas nacionales e internacionales como, por ejemplo, el mexicano Humberto Ramos, quien trabaja para Marvel, Tom Richmond, caricaturista gringo, y Takayuki Watanabe, caricaturista japonés. Muchas veces ni recuerdo el nombre, sino el trabajo, quien habla por ellos. Me gusta mucho el trabajo de «Moebius», no es tanto por el cómic, sino por el trazo que hace y mis compañeras. En cualquier cosa puedes encontrar inspiración, siento que lo más importante es tratar de no copiar el estilo de otro (porque) no es lo mismo influencia que copiar, no vale la pena porque eres un clon. Haz tu estilo y así, cuando vean tu trabajo, sabrán que tú lo hiciste con tu sello personal.

EA: ¿Cuáles han sido las últimas caricaturas que has hecho?

RL: Fueron las que hice para la exposición, una con la que me siento muy satisfecho es una de Bruce Lee porque lo admiro mucho, a Marlon brando como el padrino e hice a mi amigo y compañero Pierre David.

EA: ¿Qué consejo le das a las personas que están empezando a dibujar?