450 escuelas cerradas y aproximadamente 1.3 millones de estudiantes mexicanos se quedaron sin clases el pasado 20 de agosto por las huelgas y movilizaciones realizadas por maestros al sur del país, quienes están en contra de la reforma educativa que, entre otras cosas, pretende evaluarlos.
Así, la esperanza más grande que tiene nuestro país de mejorar está siendo destruida por las mismas personas que educan a nuestros hijos. Los profesores del estado de Oaxaca decidieron hacer una huelga el inicio del ciclo escolar por la reforma educativa, la cual contempla la evaluación de los docentes de forma periódica y la utilización de esos resultados para otorgar su permanencia en el cargo, así como ascensos e incrementos salariales, entre otros puntos.
Como la frase popular dice :»El que nada debe, nada teme». Por ello, ¿es que acaso los profesores no se sienten capacitados para enseñar? Si esta clase de personas son las que preparan a las futuras generaciones, ¿por qué no exigir lo mejor? Además no es solo una evaluación negativa, sino que gracias a estas revisiones ellos podrán ir ascendiendo para tener un mejor puesto y obviamente tendrán un incremento salarial conforme a su mejora laboral.
Empero parece ser que a ellos se les hace muy injusto tener que esforzarse para tener un aumento: no, ellos quieren tenerlo sin estar sometidos a evaluaciones. Esto es algo absurdo. Sí, son trabajadores que pueden exigir derechos, pero también nosotros podemos exigir una mejor calidad educativa para nuestros hijos.
Por otra parte, gracias a sus huelgas se ponen en riesgo el trabajo de otras personas cerrando calles y haciéndole perder el tiempo a mucha gente. ¿Qué clase de ejemplo le están dando a sus alumnos? Puede parecer algo irracional pero sólo falta que en cualquier momento sus mismos alumnos van a querer hacer una huelga porque tampoco quieren ser evaluados.
Lo único que esta reforma busca es la manera de motivar a los maestros a mejorar y que los alumnos posean profesores con la mejor vocación.
Si queremos un México mejor, tenemos que trabajar mano a mano con las oportunidades que se nos presentan. Nadie lo dude: el futuro de nuestro país se encuentra en nuestros jóvenes.
Estoy totalmente de acuerdo, hay formas de protestar y de pedir las cosas, de mostrar el descontento que son mejores y más efectivas que la mostrada por este sector.
Pero estos maestros protestan también en contra de un gobierno que quiere volver a apropiarse de las aulas, que quiere adueñarse de la Cátedra educativa. ¿Y qué es la educación sino el elemento que solidifica y asegura el sometimiento de los futuros ciudadanos? Porque es en la escuela en donde se les enseña a los alumnos la dinámica de sometimiento (solapada bajo la sombra de la «enseñanza»), se les hace aprender quienes fueron «sus héroes» históricos, y sobre todo, SE LES ENSEÑA A CÓMO PENSAR, según la conveniencia del Estado. Ahí en donde termina la libertad de pensamiento, termina la individualidad y entra la dictadura intelectual.
Yo me uno a la protesta en contra de un Gobierno que se quiere adueñar de la mente y capacidad crítica de los alumnos.
Además, ¿No sería mejor que, en lugar de mandar a lavar ventanas a los maestros que reprueben las evaluaciones (que nadie sabe cómo será, porque en ningún lado está estipulado), se les dieran cursos para mejorar de manera palpable? En lugar de represión, crecimiento, en lugar de coerción, oportunidad…
Gracias por tus comentarios. Saludos.
Muchas gracias Eva, tus comentarios son muy valiosos; da gusto saber que hay más gente que se preocupa por su país.