La corrida de toros es una fiesta y el espectáculo más antiguo, la cual tuvo sus inicios en España. Al colonizarnos los españoles, también adoptamos ésta y muchas otras tradiciones. Sin embargo, los tiempos han cambiado y últimamente nos hemos preguntado qué tan mala es esta tradición.
¿En verdad se le considera arte al toreo cuando involucra el maltrato o muerte de un animal? Es cierto que es una tradición que se ha conservado a lo largo de los años y que puede definirse como una cuestión cultural, pero esto no implica que hoy en día se sigan maltratando a los toros.
Este espectáculo sirvió durante años como punto de reunión y diversión para la clase social alta, situación que continúa hoy en día. Sin embargo, en teoría, la clase alta “con más educación” es la que debería ser la más capacitada y responsable de promover el no maltrato hacia estos animales.
Los mayas practicaban sacrificios humanos y formaban parte de su cultura, mas no por esto seguimos sacrificando humanos. Entendemos que es nuestro pasado y forma parte de nosotros, al igual que debería de suceder con el toreo.
Al practicar la tauromaquia, estamos lastimando a un ser viviente. Si nos preocupamos por cuidar a las plantas y animales, debemos preocuparnos por el maltrato hacia los toros y dejar de argumentar que se considera una tradición. Al realizar estas “fiestas», no sólo matamos animales sino que también destruimos nuestro mundo.
Muchos animales son sacrificados para el consumo de la población, sin embargo, en las corridas de toros los animales van sufriendo y agonizando antes de morir. ¿Cómo se le puede llamar a esto una fiesta? Simplemente se va fomentando violencia.
La ley señala que el maltrato a animales está prohibido, y a pesar de esto, se permiten las corridas. El toreo es clasificado como un deporte y esto nos deja mucho que desear. Según la RAE, deporte es la “actividad física, ejercida como juego o competición, cuya práctica supone entrenamiento y sujeción a normas». Es cierto que el toreo está sujeto a ciertas normas que cumplir, sin embargo, los toros son preparados para las corridas cortándoles la punta de los cuernos para que resulte menos peligroso, lo que nos lleva a la conclusión de que simplemente termina siendo un show, más que un deporte en el que rivales compiten de manera igualitaria.
Hoy en día las opiniones se encuentran divididas: existe gente que lo considera como una tradición e incluso como un deporte que no se debería cambiar, pero por otro lado nos preguntamos, ¿hasta cuándo parará esta diversión de maltratar animales? Realmente es muy triste ver como existen personas que aplauden y se divierten ante el maltrato de un animal.
Dejando atrás la historia que tiene este espectáculo, no es más que simplemente un show a través del cual se expone el sufrimiento y la muerte de un ser vivo. Finalmente muchos argumentan que si no queremos ver este maltrato, simplemente no vayamos a las corridas, pero que no veamos las violaciones, robos, maltratos, asesinatos, tragedias y demás, no significa que no existe.
Lo mismo sucede con las corridas de toros: no por no verlas vamos a dejar de saber que un ser vivo está siendo maltratado, y lo peor, que es un maltrato permitido.
