Cada día está más cerca ese día que mucha gente espera con alegría durante todo el año. Esa época donde los niños esperan con leche y galletas a un hombre gordo con barba blanca y traje rojo, que llegue en su trineo tirado por renos, uno de nariz roja, a dejarles regalos bajo un pino decorado con luces y esferas de colores.
Rojo, verde y blanco son los colores de esta esperada fecha llamada «Navidad», reconocida como la época de dar y recibir, tiempo de amor y de paz. Mucha gente decora su casa con luces, renos, figuras de este gordo barbón llamado Santa Claus o Papá Noel, pinos, esferas y muchos otros objetos representativos de esta época.
La navidad se celebra el 25 de diciembre y es una de las celebraciones más importantes para el cristianismo, ya que en ella se celebra el nacimiento de Jesús en Belén. Una gran mayoría de personas celebran y éstos son quienes decoran y gastan dinero en adornos para sus casa, ponen su árbol, que más bien es un pino, en el cual se esperan los regalos, y si son católicos, un nacimiento en alguna parte visible de su casa.
Como sea, la navidad es tiempo de amor porque es cuando las familias se reúnen y están más unidas que nunca. Es una celebración mundial y por lo tanto se toman vacaciones en el trabajo. Las escuelas también dan dos o tres semanas para celebrar y de esa manera las familias están más unidas. Las celebraciones son a lo grande y sobre todo los platos de comida, pues es también la época del año en la que más se come y más se engorda. Sin olvidar el recalentado navideño: el día después de navidad en el cual se acostumbra volver a comer lo que se cocinó la noche anterior y simplemente calentar lo que sobró. También acostumbran a ir a misa, los católicos, a agradecer a Dios por un año más de bendiciones y de salud.
Esta navidad debemos pasarla con quienes más queremos, debemos sonreir y olvidar todo lo malo en nuestras vidas, pero sobre todo esforzarnos por ser mejores personas.
¡Feliz navidad!