San Francisco de Asís llevó una vida austera y reservada. Asimismo, se le considera el primer ser humano en experimentar los estigmas de Jesucristo.
La hermosa costumbre de representar el nacimiento de nuestro Salvador con figuras o imágenes tuvo su origen gracias a una iniciativa de San Francisco de Asís.
En 1233, recordando San Francisco su reciente visita a Belén, anhelaba representar en vivo la escena protagonizada por la Sagrada Familia, al igual que toda la expresividad, la pobreza y la gloria de aquella gruta.
De esta forma, en un cueva natural, cerca de Greccio, formó en esa Navidad, el primer nacimiento con un buey y un asno vivos y una imagen del Santo Niño sobre unas pajas.
Esta costumbre se extendió por todo el mundo y es una excelente manera de crear una atmósfera navideña en el hogar y otros ambientes.