Un tesoro muy apreciado e invaluable es tener el amor de alguien, pero es es un sueño hecho realidad cuando un amor platónico se vuelve alcanzable.
El amor es algo que es parte de nuestras vidas, y querámoslo o no, es imposible desligarnos de ese sentimiento. Sólo el ser humano es capaz de amar, de decir «te quiero», «te amo», «te extraño», «te necesito»… sólo el ser humano es capaz de cometer errores por amor, de hacer tonterías, de cruzar el universo, llegar hasta la Patagonia o que sé yo… pero no creo que exista en el planeta tierra un solo ser humano que no haya sido amado y que no haya amado nunca.
Los amores perfectos existen y ésos son los platónicos, utópicos, los inalcanzables, los imposibles. Al ser un amor idealizado, le vemos todas las cualidades posibles, para nosotros no tiene defectos, y sin importar la distancia o el tiempo, ese amor platónico está latente. Incluso podemos estar enamorados de alguien y además tener un amor platónico; quizás después de algún tiempo esa persona nos deje de gustar, pero el amor platónico ahí seguirá, en lo más alto, entre las nubes.
Quizás tuvimos un fugaz romance o una relación efímera y esa persona se quedó dentro de nuestro corazón, no la olvidamos, y a pesar de que ya no sepamos nada o no la/lo veamos, si realmente te enamoraste, sigues suspirando y pensando en esa persona, sigues sintiendo que está cerca.
Todos se han «enamorado» de algún artista; de niños seguramente pensábamos que cuando crezcamos nos íbamos a casar con tal cantante o actor, que recorreríamos el mundo con tal de ver a nuestro amor e incluso ahora mucha gente (sino es que todos) siguen teniendo un amor platónico.
El amor platónico igual puede darse con algún amigo, compañero o desconocido. Puede ser que haya alguna amistad que siempre nos ha gustado, pero sabemos que no siente lo mismo por nosotros, ya tiene una relación o simplemente jamás le dijimos por miedo al rechazo y jamás averiguamos si habríamos tenido una oportunidad. También sucede que nos «enamoramos» de alguien que vemos con cierta frecuencia y por alguna razón no sabemos nada (o muy poco), pero tiene un no sé qué que nos gusta y a lo mejor tiene alguna habilidad o ha hecho algo sobresaliente y por eso lo/la admiramos.
Tal vez simplemente un día, caminando por la calle o al irnos de viaje, vimos a alguien y nos robó el aliento en tan solo segundo; quizás pudimos hablarle, pedirle su numero, robarle un beso, tomarle una foto o quizás no. A lo mejor estabas en el auto manejando y cuando la luz estuvo verde tuvimos que seguir y perdimos de vista a esa apersona y desde entonces ese segundo se ha reproducido frecuentemente en nuestra mente esa imagen, se mantiene fresca y sientes que vives el momento una y otra vez.
Cuando alguien te gusta y sabes que por alguna razón será un amor imposible o no puede darse el romance por fuerzas mayores, es bueno tener algún recuerdo, un recuerdo feliz con esa persona o relacionado a ella, porque quién sabe: a lo mejor ese amor platónico que tenemos, se vuelve realidad más pronto de lo que imaginamos.
Muy buena, difícil agregar algún comentario.
gracias!!!!