Un buen fin de semana, mi papá se acercó a mí mientras me disponía a atrapar a uno de los muchos pokemón que me encantan en la mundialmente exitosa aplicación ‘Pokemón Go’.
Posteriormente, mientras observaba, me pidió amablemente que le explicase el funcionamiento de aquella aplicación, tarea que hice con mucho gusto.
Al finalizar mi explicación, mi papá dijo algo que me puso a reflexionar un buen rato: “¡Qué gran idea! Al menos así los chavos de ahora conocerán otros lugares que no sean el sillón de su sala”. Una gran observación de parte de un individuo perteneciente a una generación muy diferente a la nuestra.
Aunque, pensándolo bien, la dirección que están tomando los creadores de videojuegos es una propuesta muy factible para reducir el sedentarismo entre sus consumidores.
Ahora tenemos a ‘Pokemón Go’ que, básicamente, te obliga a salir de tu zona de confort, caminar, socializar con otras personas, en fin, ir al exterior.
No obstante, la idea de que las personas no solo se limiten a presionar unos cuantos botones en la comodidad de su sala no es para nada reciente.
Tenemos a ‘Kinect’ de Xbox, que surgió en 2010, o ‘Wiimote’ de Wii. Estas plataformas tienen como finalidad que tú como usuario no seas solo el que controla al juego, sino que seas parte de él.
Pienso que esta tendencia actual de los videojuegos de activar a las personas al hacerlas saltar, bailar, correr, caminar, entre otras cosas, es algo positivo para la salud física de las mismas, así como una forma diferente pero eficaz de divertirse.
Así que, si aun no has probado alguna de estas propuestas, ¡anímate a hacerlo! Es momento de ser, ya no el consumidor de la diversión, sino el creador de la misma.