Mil 800 personas, nacionales e internacionales, presenciaron el fenómeno frente al Templo de las Siete Muñecas
Superando el número de personas esperadas, aproximadamente mil 800 personas asistieron jueves el 21 de marzo a Dzibilchaltún para presenciar el equinoccio de primavera.
Como cada año, la llegada de la primavera consistió en el espectáculo natural de luz y sombra en el Templo de las Siete Muñecas.
Constanza Soledad, entre los visitantes, comentó que acudió al mismo evento el año pasado y no se logró ver nada, a comparación de ahora, que pudo tener el sol y la luna contrastados, lo cual le “pareció maravilloso”.
La zona arqueológica abrió sus puertas a las 4:30 horas para que a las 6:00 los visitantes estuvieran listos para el espectáculo, que duró aproximadamente una hora. Al final, la zona cerró sus puertas a las 16:00 horas.
Los costos de entrada a la zona arqueológica fueron desde los 75 pesos para locales hasta 227 pesos para el público general.
Dzibilchaltún es una de las zonas arqueológicas más antiguas de la zona maya y sus
principales edificios se hicieron entre el año 600 y 1000, cuando albergaba unos 40 mil habitantes, según datos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
