Nueva forma de detección de drogas

Nueva forma de detección de drogas

El consumo de drogas es un gran problema en la actualidad, y para ello, deben de aplicarse análisis antidoping mucho más precisas como la prueba Elisa, expresó Javier Barberena, Químico Farmacéutico y Biólogo, fundador de la compañía Detectatiempo en la entrevista de hace unos días.

«La prueba Elisa es una solución completamente sensible y precisa, convirtiéndola en una gran herramienta en empresas y universidades», destacó el Químico Barberena.

De acuerdo con el Químico Barberana, en la última encuesta de Problema de Drogadicción en México de 2019 que emitió la Secretaría de Salud del área dedicada al control de las drogas, el consumo de drogas se ha convertido en un problema a un nivel de transición epidemiológica.

«Un gran número importante de personas están bajo el problema de las drogas. De hecho, éstas serán un gran reto para las próximas generaciones, y si no hace nada de manera contundente, el problema va a seguir creciendo de manera importante, pero el primer paso es identificarlo» comentó Barberena.

Para darle solución a ésta problemática, se han desarrollado dos grandes grupos para la detección de antidoping que actualmente son utilizadas en empresas y escuelas. En la investigación de mercado que realizó Javier Barberena, se encontró que la mayoría de estas pruebas son de inmersión: unas tarjetas que ya vienen preparadas con componentes que hacen que visualmente se detecte si la prueba tiene droga o no de manera inmediata.

Según el Químico, estas pruebas tienen bastantes limitaciones, como lo es la falsificación de pruebas, que viene siendo la muestra de orina. “Puedes llegar con la muestra de alguien más y darla como si fuera tuya. También es muy común que la rebajen con agua del wc o con desactivadores como el cloro, destruyendo la molécula de las drogas inmediatamente”, agregó Javier.

Debido a la gravedad en la falsificación de pruebas de antidoping, empresas y escuelas decidieron tomar otras medidas y comenzaron a utiliz pruebas que se llevaran a cabo de manera presencial. Fue ahí cuando el Químico Farmacéutico Javier Barberena abrió su compañía Detectatiempo, utilizando muestras de antidoping con saliva y cabello.

«Con la prueba del cabello el componente de las drogas se queda ahí, de forma que este te indica si la persona consumió drogas y cuándo fue la última vez que lo hizo, incluso si esto fue hace meses. Por otro lado, se encuentra la prueba Elisa, un proceso más sofisticado que verdaderamente te indica si alguien tiene o no drogas» indicó el Químico.

Según explica el Químico Javier Barberena, la prueba Elisa es una muestra inmunológica antígeno-anticuerpo, de forma que a cantidades muy bajas de droga esta hace una reacción que se lee a través de un equipo especial en para verificar si la muestra es positiva, siendo mucho más automatizada y sensible que cualquier otra prueba antidoping.

«La prueba Elisa es extremadamente sensible. Este procedimiento se basa en que a nivel de nanogramos se colocan unas placas con el anticuerpo, de forma que cuando se pone la droga en la muestra, esta hace una reacción colorida. Esta prueba se lee mediante la absorción de las ondas de luz que pasaron por el pocillo gracias a la alta tecnología que utilizamos”, afirmó Javier Barberena.

Según el Químico Javier, decidió invertir en su empresa Detectatiempo para abrirle puerta a cualquier posible error de dedo utilizando una nueva tecnología capaz de automatizar la prueba con un robot, el cual sea capaz de realizar todas las aplicaciones de la prueba, cerciorarse de que las cantidades siempre sean las mismas y que no haya riesgo de contaminación, así como el proceso de lavado, un trabajo bastante laborioso.

«Algo muy importante es el tema de la custodia. Esto significa que cada muestra tiene un código de barras que lleva una trazabilidad durante todo el proceso hasta la entrega de resultados, y estos son factores importantes que son diferenciados de lo que hay actualmente en el mercado» resaltó el Químico y Biólogo Barberena.

Detectatiempo tiene el objetivo de mejorar la vida de las personas a través de la identificación oportuna y confiable de muestras no invasivas que se encuentren en lo último de la tecnología. No solo le pone fin a pruebas no fidedignas, si no que da una solución confiable. A su vez, la empresa cada vez se va expandiendo más, siendo la Universidad Anáhuac la siguiente en utilizar esta avanzada tecnología.

 

 

 

 

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